La Carta
Tu mejor instrumento de ventas.
Tus clientes han llegado y están expectantes por descubrir qué tienes que ofrecerles. Es cuando se produce esa conversación silenciosa donde tu oferta y la demanda se presentan a través de tu carta.
Lo que van a encontrar no son solo platos.
No es solo comida.
No…
Es mucho más que eso.
Es donde se refleja la personalidad de tu restaurante y la elaboración de tus obras a través de la selección de tu gastronomía.
Y todo eso en una carta, es más importante que el tamaño, el color e incluso los precios.
Porque tu carta es una promesa a la expectativa que tiene tu cliente a cerca de lo que va a recibir. Es algo así como un momento de seducción…
Es como la sinopsis de una película o un libro, clave para despertar el interés y con el objetivo de ser elegido.
En definitiva, es la mejor tarjeta de presentación de tu restaurante (y de ti mismo).
No te vamos a hacer la mejor carta del mundo. Ni la más bonita. Y quizá tampoco la más barata.

Lo que te vamos a hacer es una carta que refleje la identidad de tu gastronomía y el contexto que la rodea. Que con ella consigas…
… bueno, contado arriba está.
Si no tienes carta o quieres cambiar la que tienes, abajo tienes un botón que te lleva a contactarnos. Verás un formulario sencillo y fácil de completar.
Te contestaremos antes de 72 horas (el domingo es de azúcar).
Frío

— Camarero, un carpaccio de gambas, por favor.
— Disculpe, no nos queda, pero puedo ofrecerle…
¿Te imaginas esta situación en tu restaurante?
Para empezar, la experiencia de tu cliente ha caído en picado y tú has perdido una venta.
En el mejor de los casos, podrías evitar esa conversación si te anticipas a informar a tu cliente de qué cosas de la carta no tienes para servirle hoy. Lo que igualmente arruinará su expectativa y eso, puede evitarse con una correcta cadena de abastecimiento.
Si lo has puesto en la carta, tienes que poder servirlo (a no ser que sea estacional y fresco).
Quizá tienes un problema de espacio para almacenamiento en frío, provocando que la demanda supere tu oferta. O, has hecho una mala gestión de aprovisionamiento y no puedes mantener tu oferta disponible y al día.
En definitiva, te ves obligado a privar a tu cliente de eso que desea tomar.
Evita tener que decirle a un cliente “No nos queda”.
Si te has visto o deseas no verte nunca en esta situación y lo que la provoca es la falta de un espacio propio para almacenar tus productos en frío y disponer de ellos sin que te pille el toro, entonces, podemos solucionártelo.
Nos da igual si quieres un espacio en nuestras cámaras de frío para guardar tus productos aunque no sean distribuidos por AVA. Te lo damos.
Si quieres hablar con nosotros, abajo tienes un botón que te lleva a contactarnos. Verás un formulario sencillo y fácil de completar.
Te contestaremos antes de 72 horas (el domingo es de azúcar).